BECKETT: LAS DIOSAS DE CADA MUJER (9)

BECKETT: LAS DIOSAS DE CADA MUJER (según Jane Shinoda Bolen)

AFRODITA / VENUS:

El Mito del nacimiento de la Diosa Afrodita, tiene una  procedencia oriental muy antigua.

En él se narra como Gea (la Tierra), incita a sus hijos contra su padre Urano. Su hijo  Cronos (Saturno), asume el reto de derrocar a su celeste padre y con una guadaña le castra cuando está a punto de unirse con Gea  y arroja su miembro sexual amputado, al mar. De la espuma formada alrededor, nace la Diosa Afrodita, muy hermosa, desnuda y ya adulta, que es llevada sobre las aguas del mar, por el viento Céfiro, en una concha nacarada, acompañada por Tritones,  hasta la isla de Citerea, la actual Chipre, que desde entonces será su Reino. El epíteto Cipris, con el que también es conocida, la relaciona con ésta isla. Y es por ello que de Cipris, deriva la palabra "ciprina", que es la sedosa y lubricante humedad que emana el sexo femenino, cuando la mujer se erotiza. Porque  Cipris/Afrodita, no solo es la Diosa de la Belleza, sino también es la Diosa del Amor Erótico y como tal preside y reside en el cuerpo de las mujeres.

Ésta Diosa, simbolizaba en el Panteón Olímpico de la Antigua Grecia, el Amor y la Atracción Sexual, al que todos (mortales e inmortales) estaban sometidos, (excepto Atenea, Artemisa y Hestia, como ya sabemos). Afrodita aparece siempre representada  joven, hermosa, relajada, sensual y muy ligera de ropa. Pero, aunque todos los Dioses  la deseaban y querían desposarla, ella eligió por esposo al feo y cojo Dios Hefesto, (el Herrero divino,  más conocido entre los romanos como Vulcano) al que ni mucho menos se mantuvo fiel. Nunca fue violada y tuvo muchos amantes, con los que tuvo numerosos hijos:

Con el Dios Ares, Señor de la Guerra, tuvo cinco hijos: Eros, (Dios del Amor Erótico),  Anteros, (Dios del Amor Correspondido), Deimo, (el Genio del Miedo), Fobo, (el Genio del Pánico) y Harmonía, tan bella como su divina madre Afrodita. Con el Dios Hermes, tuvo a Hermafrodito, (una divinidad bisexual, con doble naturaleza, dotado de gran belleza). Con el Dios Poseidón, Señor de los Mares y Océanos, tuvo a Érice, Rey de Sicilia. Con el Dios Dioniso/Baco, tuvo a las tres Cárites (las tres "Gracias": Aglaya (Belleza), Eufrosine (Júbilo) y Talia (Floreciente) que formaban parte de su cortejo. Del mismo Dios, tuvo a  Príapo (una divinidad menor de carácter obsceno, con un gran falo erecto, símbolo de la fuerza fecundadora de la Naturaleza). Y del mortal Anquises, tuvo al héroe griego Eneas, que ante la derrota de Troya, ayudado y protegido por su madre Afrodita, huyó al Lacio, donde casó con Lavinia, hija del Rey  y donde sus descendientes Rómulo y Remo fundaron la ciudad de Roma. Es por ello, que Julio César, que se consideraba descendiente de Eneas, lo fuera también de Afrodita.

Existen dos Mitos asociados a la Diosa del Amor,  Afrodita: 
Uno es el el episodio conocido como

el "Juicio de Paris", donde éste  joven e ingenuo pastor , hijo del Rey de Troya, hizo de inexperto juez sobre quién era la Diosa más bella: Hera, Atenea, o  Afrodita. Y ésta, astutamente le prometió la más "bella de las mujeres", la incomparable y bellísima Helena, esposa de Menelao, Rey de Esparta. Ganó Afrodita, pero tuvo como consecuencia la conocida y  mítica Guerra de Troya que ha sido llevada al cine en numerosas ocasiones.

Y el otro es el relato sobre el Amor y la Pasión  de Afrodita por el bello Adonis que terminó tragicamente con su muerte, y donde reconocemos una adaptación del conocido Mito oriental de la Gran Madre y su Divino Amante. También son frecuentes las leyendas, en las que Afrodita infunde Amor, con la ayuda de su hijo Eros/Cupido, a un pobre mortal, o ayuda  en sus pretensiones amorosas a otros, o castiga a quién se le opone.

En éste sentido, los relatos patriarcales de regusto homérico, la muestran caprichosa, veleidosa, frívola y desconsidera. Aunque lo cierto es que Afrodita es la Diosa de la Belleza, el Erotismo, la Atracción, y la Sensualidad,  atributos tan necesarios en nuestra vida, como los atributos de las otras Diosas. Además Afrodita, siempre fue dueña de sí misma y de su propio cuerpo, manteniendo relaciones amorosas y sexuales, sólo con quién ella deseó. Esto la hace totalmente diferente al resto de Diosas del Olimpo, que o bien "pasaron" de su sexualidad, (como Artemisa, Atenea y Hestia), o bien fueron violadas y vejadas, (como Hera, Deméter y Perséfone).

La Venus romana, era en un principio una diosa menor de la Naturaleza y de la Primavera, protectora de los jardines y huertos y de quienes los cultivaban, aunque por influencia de la cultura y de la religión griegas, fue asimilada a Afrodita, pasando entonces a ser Diosa de la Belleza y del Amor, extendiéndose su culto por toda Italia, donde eran muy numerosos los templos dedicados a ella. La unión de Venus con Marte, correlato latino de Afrodita y Ares, está inspirado en la leyenda griega.

Venus fue venerada en Roma bajo numerosas advocaciones: 

Venus "Victrix" (Victoriosa), Venus "Equestris" (Amazona),  Venus "Salacia" (Marina), Venus "Félix" (Feliz), Venus "Genetrix" (Madre Fértil), Venus "Cloacina" (Purificadora),  "Ericina" ("Amor Impuro"y por ello  patrona de las prostitutas), Venus "Calipigia" (la de las "bellas nalgas"), Venus "Libertina"(la de los Libertos), Venus "Lubentina"(Placentera o Apasionada), Venus "Murcia"(del Mirto, que le estaba dedicado), Venus "Obsecuens"(Indulgente, cuya festividad se pagaba con las multas de las mujeres confesas de adulterio), Venus"Urania" (Amor Espiritual), Venus "Verticordia"(transformadora de Corazones y protectora contra el vicio), Venus "Amica"(Amiga), Venus "Caelestis"(Celestial) y Venus "Aurea"(Dorada).

AFRODITA / VENUS como Diosa Alquímica,  (según Jane Shinoda Bolen) :

A la Diosa Afrodita, Shinoda Bolen la sitúa en una categoría por derecho propio. Recordemos que para ésta autora, son Diosas "Vírgenes" : Artemisa/Luna, Atenea/Minerva y Hestia/Vesta. Y denomina Diosas "Vulnerables" a las Diosas Hera/Juno, Deméter/Madre y  Perséfone/Proserpina. De todas ellas ya he hablado en anteriores entradas. Ahora le llega el turno a Afrodita/Venus, a la que Shinoda Bolen denomina Diosa "Alquímica". ¿Por qué?

Diosa "Alquímica", dice, es una calificación adecuada para reflejar el poder transformador que Afrodita por sí sola, poseía. Ella era una presencia sobrecogedora que hacía que todos los mortales y también las deidades (excepto las tres Diosas Vírgenes), se "atrajeran", se "enamorasen" y crearan nueva vida: Un ejemplo: Afrodita para Pigmalión, convirtió una estatua de la que se había enamorado, en una mujer viva, (mientras que sabemos que Atenea, convertía a las personas en piedra). Era Afrodita quién inspiraba la poesía y los persuasivos discursos amorosos, y es ella la que simboliza el poder transformador y creativo del Amor.

Aunque comparte alguna característica común con las otras Diosas, tanto "Vírgenes" como "Vulnerables", no pertenece a ninguno de éstos grupos. Porque definitivamente sabemos que Afrodita  no era vírgen, aunque como ellas, siempre hizo lo que le plació. Tampoco fue una Diosa "Vulnerable", ya que nunca fue violada, pero como ellas, sí estuvo casada y tuvo numerosos hijos. La  Diosa Afrodita nunca fue una víctima y no sufrió como tal.

La Afrodita "Alquímica" es el "Arquetipo" de mujer sensible, extravertida y segura de sí misma que protagoniza y asume el papel "Arquetípico" de "Amorosa y Sensual Amante" (aunque también puede ser la esposa). Como tal es generadora de Vida (en sentido físico o creativo-artístico).

Lo que la hace diferente y la distingue  totalmente de las otras Diosas es que tiene la capacidad de disfrutar plenamente del Placer y la Belleza.

La Diosa Afrodita es siempre  irresistible y cualquier persona bajo su férula, reconoce enseguida la "atracción"magnética" que de ella se dimana. La Diosa del Amor produce una "química" especial entre dos personas, un "impulso" para acercarse, "conocerse" y llegar a la "consumación" del "Deseo" de forma agradable, voluntaria y placentera para ambas partes, ya que no existe violencia, ni afán de dominio o violación, en la armoniosa  Venus. Y ese "ímpetu" al que llamamos "enamorarse",  puede ser tan sólo sexual y momentáneo, o puede ser mucho más profundo y transformador, en el nivel psicológico,  y emocional, además de más perdurable en el tiempo, dando lugar a uniones donde la intimidad no sólo es física, sino donde también, mente, corazón y espíritu, alcanzan su realización y perfección.

Continuará!    Gracias por leer!